Un cristal personal es aquel con el que tenemos una conexión especial. Podemos utilizarlo para meditar, trabajar con la energía y en procesos de sanación. Colócalo en un lugar donde habitualmente te encuentres cómodo, el cual en lo adelante será: tu espacio personal. Este cristal es el que elegimos entre muchos, el que nos atrae tan sólo verlo, aún cuando desconozcamos sus propiedades energéticas y curativas.
Los cristales personales nos llegan siempre para ayudarnos en el trabajo interior, para ofrecernos enseñanzas, ya que contribuyen en nuestra evolución y aprendizaje cotidiano.
Acostúmbrate a trabajar siempre con el mismo cristal durante largo tiempo, de este modo tu vibración y magnetismo se integrará en él y él en ti. Será reconfortante y hermoso cuando surja entre ambos la inmensa sensación de unidad.
El ejercicio que describo a continuación te ayudará a conectar con él:
- Ambienta el espacio personal que has elegido, encendiendo una varita de incienso, velas, música relajante, coloca una lámpara de sal y una fuente de agua.
-Siéntate cómodamente y coje entre tus manos el cristal elegido y lo pondrás en el plexo solar (chakra Nº 3).
- Ahora respira profundamente y canta tres veces: "OM".
- Visualiza como por el chakra de la coronilla penetra un rayo de luz dorado y va descendiendo por los chakras 7 (coronilla), 6 (tercer ojo), 5 (garganta), 4 (corazón) y 3 (plexo solar).
- Al llegar a este chakra el rayo se transforma en una esfera de luz y envuelve tus manos y el cristal.
- Ahora dirás: Te agradezco que hayas llegado a mi vida y recorramos este camino juntos. Que con tu luz y vibración despiertes todos mis sentidos hacia la sabiduría, la evolución personal y la sanación. Te doy las gracias porque siento que me puedes ser muy útil.
- Espera unos minutos para conectar con el cristal y visualizas el rayo dorado y las manos con el cristal en el centro.
- Visualizas nuevamente como por el chakra de la coronilla penetra un rayo de luz dorado y va descendiendo por los chakras 7 (coronilla), 6 (tercer ojo), 5 (garganta), 4 (corazón) y 3 (plexo solar).
- Ahora respira profundamente y canta tres veces: "OM".
- Lleva el cristal hasta tu corazón y dile con mucho amor: Gracias por entrar en mi vida.
Puedes hacer este ejercicio para conectar y sintonizar todos los cristales que desees. Es recomendable hacerlo uno por uno, ya que cada cristal tiene propiedades y usos diferentes.
Me gusta, es claro y práctico, como la espiritualidad que tú emanas. Sencilla y accesible a todos aquellos que son capaces de creer en sus posibilidades. Por cierto soy Analía.
ResponderEliminarGracias Analia!, justo de eso se trata, claridad y sencillez para así poder colaborar.
ResponderEliminarHola Naibeth, gracias por compartir esto, es muy interesante. En mi caso el cuarzo rosa y la amatista son mi debilidad, practicaré este ejercicio a ver que tal. Saludos y enhorabuena por tu blog!!!!
ResponderEliminarHola Yai!, gracias a ti por seguirme. Haré lo posible por ir nutriendo este pequeño espacio con más ejercicios prácticos. Un abrazo de luz dorada.
ResponderEliminarFelicidades Nai, es precioso. Un trabajo muy bonito y facil de entender y aplicar a nuestro dia a dia. Muchas gracias por compartir. Un beso grande.
ResponderEliminaresta muy logrado el blog
ResponderEliminarMuy bonito guapisima! lo pondré en práctica...Un Besazo y comparto con permiso muaka
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